CIENCIA MALDITA DOS PARTE 4 Christian Perales

CIENCIA MALDITA DOS PARTE 4. 

OBSCURIDAD

Pasaron alrededor de veinte minutos en los cuales estábamos impacientes por que nuestro robot encontrara algo relevante para nuestra búsqueda, a través de sus cámaras remotas solo veíamos túneles llenos de inmundicia, ratas, insectos, basura y pintas que algún vándalo habría hecho, cada vez ese sitio parecía estar más obscuro...

-Oye Fargas... ¿Cuándo construyeron estos túneles?.... ¿no se van a inundar?....-
-No.... no creo... fueron construidos en el 2016.... solo son auxiliares para desaguar el metro, y algunas calles... se necesitarían diez días de lluvia continua para que se llenaran... pero por si acaso, ¿sabes nadar? jajajajaja-
-mejor... seguimos viendo...-

Atentos a la pantalla llegó el momento en el que pudimos ver una escena fugaz, algo había pasado justo frente a nuestro amigo de plástico y metal. era algo como una sombra, pero de inmediato desapareció como llegó. 

El robot giró su cabeza e intentó enfocar... pero algo terminó con él, de sobra sabíamos que era, ya teníamos a nuestro monstruo, que en un giro del destino, arrancó la cabeza de nuestro androide, lo último que alcanzamos a observar fue el rostro borroso del engendro, luego sus pies y una bolsa de yute....

-¿es èl Fargas....?-
-si... ¡vamos!.... -

De inmediato los dos oficiales prepararon sus armas, Fargas sacó de entre su chamara su escuadra.... y comenzaron a correr en busca de la última ubicación que había registrado el robot. 

Yo corrí tras ellos, las luces de las linternas apenas si lograban iluminarnos un poco el camino frente a nosotros...aquel lugar era un laberinto en el que de repente caminábamos con el agua hasta las rodillas, y juro que por momentos´, al menos yo, podía sentir como algo se enredaba en mis piernas. 

Llegamos hasta un lugar, algo que sería como una especie de glorieta, ahí el túnel por el que veníamos se dividía en seis direcciones distintas...yo veía a través de una tableta, la ubicación que aún mandaba lo que quedaba del robot, pero la señal cada vez se hacía más débil, síntoma inequívoco de que estaba tan dañado, que su batería se estaba agotando.

-¿por dónde Cuenca?....-
-por ahí... -
señalé uno de los túneles, y seguimos caminando por ahí, bajamos el paso pues la señal en ese punto era muy fuerte...

-no lo entiendo... debería estar aquí...-
-A lo mejor ya se descompuso...¡cuidado!....

En ese instante, como un flash, Fargas me empujó hacia un lado... del techo del túnel cayeron los restos del androide... el monstruo los había arrojado sobre nosotros, para después trepar una de las paredes y escapar por un túnel más pequeño en la parte alta de una de las paredes....

-¡disparen!-

Esa fue la orden del comandante, y en aquel momento todos accionaron sus armas, yo francamente tuve temor de disparar, así que solo me limité a observar...

-Se fue comandante....-
-ahhhh ¿tú crees Trejo?...-

No se si en ese instante perdí la cordura por un momento, o me sentí comprometido a hacer más, debido a no haber disparado, pero quise asomarme a ese pequeño resquicio por donde había escapado el monstruo....

-oigan... ¿pueden subirme?...-
-¿para qué?....-

-Tengo una corazonada, creo que este túnel conduce a una cámara... podríamos... podríamos acorralarlo...-

-Está bien Cuenca, pero no te vayas a ir más allá, no creo que seas muy rápido disparando, así que estarías a merced de esa cosa-

Fargas y Trejo me subieron, hasta que trepé por la boca de esa diminuta coladera... efectivamente había calculado bien, a gatas me deslicé, y al llegar al fondo pude ver a ese hombre... a ese demonio surrealista caminando por una cámara que se hacía más grande al otro lado, pero era una caída de tres metros en ese punto, ahí fue donde supe que tan dotado estaba ese ser, pues había logrado saltar sin hacerse daño.

Cuando cruzó al otro lado de una de las zanjas volteó a verme, y sonrió con esa morbidez que me habían descrito los archivos... sus dientes manchados de sangre parecían más bien una serie de colmillos, sus ojos enrojecidos y su cabello enmarañado, levantó su mano y me señaló con su dedo índice, ahí supe que su asunto conmigo era algo personal....

Me coloqué listo para dispararle, ya que se había quedado parado frente a mi, y aun cuando eran más de cinco metros, valía la pena intentar dispararle, pero cuando apenas iba a jalar del gatillo, sentí una vibración apenas perceptible en el suelo... quizás las paredes, y comencé a escuchar una especie de zumbido... al principio muy bajo, pero cuando se intensificó... noté que aquel ruido infernal, lo estaban produciendo miles de arañas, que venían hacia a mi.

De inmediato di la vuelta para regresar con mis amigos... las arañas ya me estaban ganando la carrera, de pronto mientras gateaba hacia el lado por donde entré, podía sentir como algunas de ellas se subían a mi ropa, fueron segundos que se me hicieron eternos... cuando llegué a la salida simplemente salté, Trejo con su corpulencia alcanzó un poco a suavizar mi caída....

-¡arañas!-

Fue lo único que pude decir con cierta coherencia, después todos esos bichos comenzaron a salir en busca de nosotros...

-¡corran!-
Gritó Fargas quedándose atrás, para cubrir nuestra retirada... cuando supo que estábamos a una distancia segura, hizo lo único que quedaba por hacer ante semejante amenaza. corrió unos pasos, después pude escuchar un clic, seguido de un grito....

-¡granada!....-

Después de eso sobrevino una gran explosión obviamente amplificada por el hecho de que estábamos en un lugar cerrado... fue tan grande el sonido, que por un instante nos quedamos sordos, pude ver como caía al suelo Susana, mientras que el oficial Trejo, alcanzaba a refugiarse tras uno de los sólidos muros del túnel, yo, por mi parte, entre la confusión simplemente caí a una de las zanjas, no era profunda como para ahogarse, pero sobra decir el tipo de agua que corría a través del canal.

Después de la conmoción inicial, tardamos algunos minutos en reponernos, el ruido nos había aturdido, además de que con la explosión de la granada, se había levantado una gran nube de polvo....y para desgracia de nosotros, se había colapsado la pared, tapando el túnel por el que habíamos llegado a ese lugar....lo único moderadamente bueno era que se habían destruido por completo las arañas.

-¿están bien todos?..-
Preguntó Fargas a quien la detonación, le había causado numerosos raspones y un profundo corte en la ceja....
-Si... si...-
-¿Susana?....-
-si jefe... me agarró lejos...-

-Con eso no contaba Cuenca....dime que eso no es la pantalla del mapa...-
De inmediato fijé la vista en el arnés que sostenía la tableta, en el justo momento en el que esta se iba apagando, se había mojado cuando cayó al agua junto conmigo, además de que la pantalla se había estrellado....quise encenderla nuevamente, pero fue totalmente en vano.

-¿estamos atrapados?-
Increpó Trejo....
-No.... lo se....-

Estaba a punto de perder el control de mis emociones, pues en ese momento sentí que si lo estábamos, en aquel lugar de terrible obscuridad no había forma de orientarse, si volvíamos al otro túnel, pronto nos toparíamos con la glorieta, y después no sabríamos cual de los túneles nos conduciría al exterior, si nos equivocábamos podríamos ser arrastrados a un colector de agua de más de sesenta metros de profundidad. 

Pero Fargas era un hombre que no se rendía fácilmente... y estaba el hecho de que no podíamos darnos por vencidos, debíamos intentar salir de ahí. 

Así que el comandante de pronto dijo lo que hasta el momento solo los demás habíamos pensado.

-Bueno... hay que caminar, miren ¿ven los ladrillos?... he notado que conforme íbamos bajando han ido cambiando de tamaño...-

-Si... además los de la entrada eran rojos....- Interrumpí

-Bien, iremos por la orilla sin separarnos... si encontramos un obstáculo lo rodeamos, nada de brincarlo... nos guiaremos por los ladrillos y las tapas de las coladeras ¿está claro?-

Estaba claro... no había de otra de todos modos, comenzamos a caminar y fueron pasando los minutos que se fueron haciendo horas, con lo sucedido durante nuestro primer encuentro con el Kavner, habíamos perdido dos armas, por lo que Susana solo traía consigo una escuadra, Fargas la suya, ´pero Trejo y yo estábamos desarmados, también habíamos perdido nuestra linternas así que solo nos quedaba una, para todos, lo cual hacía muy complicado el caminar.

En algún momento caminamos en círculos y volvimos al mismo punto, pero una vez superado eso, nos orientamos un poco, el problema fue que fuimos a parar a una especie de cámara, estaba seca, conectaba a otra serie de túneles pero ahí había una pequeña señal de esperanza... alguien de la constructora había dejado una marca en la pared "Salida de máquinas y cascajo" , era nuestra salida, de ese lugar...pero antes de movernos, Susana frunció la nariz.

-oigan ¿a qué huele?....-
-Es un drenaje Susanita, huele a eso... a drenaje... salgamos de aquí....-
-Esperen- dijo Fargas....
-no, ese olor no es del drenaje... huele a.... a muerto....-

Guiados por el olor, caminamos a otra especie de cámara conectada por otro de los túneles....al llegar a este sitio, lo que vimos nos dejó atónitos y sumamente asqueados....

En el interior de ese sitio colgaban del techo, como si fueran reses, un sinnúmero de cuerpos humanos, otros tantos habían sido desmembrados... habían órganos en recipientes de cristal....era como la antesala del infierno justo frente a nuestros ojos....

-¿fue el Fragas... ?¿fue la cosa?....-
-Así es....hijo de puta... ¡todos son niños!-

CONTINUARÁ....