LA MUJER DEL CABELLO BLANCO Dulce Belen

LA MUJER DEL CABELLO BLANCO.

Esta historia me la contò mi abuela materna cuando me quedaba con ella en su casa.

Cuentan que hace muchos años en xochimilco como en muchas partes de la republica mexicana la mujer se hacia lucir por su larga y sedosa cabellera, no existia mujer que no luciera sus largas trenzas y sus bellos peinados, Xochimilco no era la excepciòn

En el pueblo de Santa Cecilia existìa una ,mujer ya mayor la cual tenia dos hijas.

Una que tenìa 20 años a la cual le decian la "solterona" y otra de 15 que era la que segùn sus madre, la sacaria de pobre.

Un dia llegò un hombre muy joven de 21 años, guapo, moreno, fuerte, montado en caballo negro.

La madre de las chicas viendo la gran oportunidad de casar a la de 15, le pidiò su ayuda para algunos trabajos en la casa y le ofreciò hospedaje.

El chico era muy trabajador y era muy amigable con todos los vecinos y familia de ellas.

Todo el pueblo estaba feliz y contento por su llegada, la madre empezò a engordar las gallinas y los puercos, ya olìa a mole.

Todos hablaban y murmuraban sobre lo afortunada que era esta famila por la llegada de juanito, un chico trabajador, acomedido, guapo, amigable que nunca daba un no por respuesta, siempre sonriente y dispuesto a ayudar a quien se lo pidiera.

Solo pedìa que cada luna llena lo dejaran bajar a Xochimilco para dejar flores en la tumba de su mujer que murio de parto años atràs, como para la madre de las chicas èl tenìa todas las ventajas para ser el mejor partido, solo, viudo y con tierras, le concediò el permiso que solicitaba.

Pero sucedìa que cada vez que el se iba, se perdìan cerdos gallinas y hasta caballos, y la gente comenzò a imaginar que èl por ser el que llevaba el control de esos animales era el que se los robaba, asi que pusieron un mejor alambrado en sus pequeñas granjas para evitar que siguiera pasando.

Èsto fue en vano, los animales se seguìan perdiendo.

Un dia una vecina mal intensionada a la que le gustaba èste chico y con la esperanza de ser ella la que se quedara con èl, le dijo a Marìa, la chica de 15 años, que por que no lo seguìan para cerciorarse de que juanito era el responsable de la pèrdida de los animales del rancho.

Cuando juan bajo en la siguiente luna llena, Maria junto con la vecina lo siguieron hacia la colina del cerro de Santa Cecilia, sin hacer ruido y sin que nadie se diera cuenta.

De pronto la trenza de Marìa se atorò en un pequeño ciruelo, y a pesar de la curiosidad de la vecina por ver a donde iba juan, se quedò a ayudarla.

Se tardo en desenrredar la trenza de la Maria unos diez minutos, tiempo en el que Juan siguiò su camino tan ràpido que pareciò que volò el muchacho.

Cuando ellas llegaron a la bajada del famoso camino verde, (camino que aùn existe), y que es el que baja de San Andrès a San Lorenzo Atemoaya, y en donde hay muchos accidentes, vieron son sorpresa que lo esperaba la "solterona", se tomaron de las manos y se veìan felices.

Eso causò gran enojo a Maria quèn tomò y los quiso alcanzar para darles su merecido.

Cuanto dolor habia en el corazon de Marìa, quièn no pudo desquitarse ya que en ese momento viò con horror que Juan se transformaba en un ser grotesco parecido a un lobo, pero èste caminaba con las dos patas traseras y comenzò a comer animales que su hermana destazaba, viò como èl la abrazò e iniciaron un largo baile a a luna.

Sentia mucho coraje asi que pensò esperar a que se hiciera mas tarde y cuando Juan se trasformara en hombre de nuevo lo matarìa.

Màs toda la madrugada bailo juan y su hermana, y conforme pasaba el tiempo mas fuerte se volvìa y ella le daba de comer cada cierto tiempo y Marìa veìa sus afilados y horribles dientes.

La vecina yacìa desmayada desde que viò la transformaciòn de Juan, fue una gran impresiòn para ella, pero Marìa solo pensaba en vengarse.

A pesar del sueño que sentìa, y viendo que no se cansaban de bailar, Marìa los enfrentò, en ese momento Juan se diò cuenta de su presencia y la atacò y se la tragò de una sola mordida.

Al ver esto la "solterona" reaccionò y se hecho a correr y quedò atorada su trenza en el mismo ciruelo en que se enredò Marìa antes.

Cuenta la leyenda que en la segunda curva de abajo hacia San Andrès, quedò enredada en ese ciruelo que se puso blanco y dejò de dar frutos, antes se podia ver pero ya construyeron una casa ahi,

De juan poco se sabe, unos dicen que se fue a San Gregorio y rumbo a los cerros de San Pedro Actopan, sigue viviendo haciendo de las suyas.

Es por eso que cuando es luna llena la gente deja de transitar por esa curva, porque dicen que Juan visita a la solterona y el ciruelo llora cada vez que sopla el viento, que hace tres años estuvo terrible.

Hace tres años fuimos a la fiesta de San Andrès mi familia y yo, ya de regreso se hace un tràfico infernal, asì que decidimos bajar por ahì precisamente, ya està poblado, incluso ya hay una casa y està pavimentado, hay luz, agua, etc,, y del cerro que le tenìan temor ya no queda nada.

Bueno, venìamos ya de bajada cuando vimos correr a un perro grisàceo muy feo y muy mal nutrido, mi primo pensò que lo habìa golpeado con el coche, asì que se bajò, es un buen samaritano, muy noble, asì que nos obligò a bajar junto con èl para ver si necesitaba ayuda.

No vimos nada y el coche no tenia nada, asi que nos subimos
y terminamos de bajar por el camino, ya casi al final vimos a la "solterona " es una mujer de cabello blanco que lleva en la cabeza una corona de hojas.

Fue una sensacion de miedo tremanda, yo antes me burlaba de èsta leyenda ya que de recièn casada iba y caminaba por esos rumbos y nunca vi nada.

Pero esa noche escuchamos como canta ella, no da miedo, lo que da miedo es el Juan que parece un perro salvaje, se cuenta que era un nahual.

Esta historia es real y despuès de lo que vimos y escuchamos hace tres años, ahora no paso por ahì, prefiero darme toda la vuelta.

Dicen que Juan es el que provoca tanto accidente cuando està enojado, y la gente de esos rumbos no van por la fruta aunque se caiga del àrbol ya que Juan se aparece y màs cuando hay luna llena.