Recordando a mi Abuelita, quien acostumbraba a contarnos historias de muertos de donde ella vivió en la Hacienda de San Francisco en SanLuis Potosí.
Les comparto una historia que nos platicò, es sobre un vecino de la Hacienda que fue al Panteón del lugar.
Caminando por las tumbas vio un cráneo y burlándose le dijo; ya que te saliste, te invito a cenar a mi casa, jajajajaja
Al llegar la noche y cuando finalmente estaba a punto de dormir, escuchò unos toquidos en la puerta a la cual acudió abrir.
Ahì parado estaba un tipo trajeado, con bombín, con una elegancia que se acostumbraba en épocas pasadas.
Èl, siendo un hombre de campo, humilde, se sorprendió y perplejo sólo atinó a decir.
Buenas Noches, diga su merced
Vine a cenar atendiendo su invitación
Fue entonces que recordó lo dicho en el panteón y no atinó a decir nada, se quedó mudo y un escalofrío le recorrió la espalda.
Se quedó paralizado en la puerta.
El muerto al ver que no le permitía el paso, le dijo que no era cortés y que lo esperaba al otro dìa en el Panteón a cenar y que no faltara.
El campesino, no fue a cenar al panteón, pero empezó a sentirse mal por el susto, dejó de comer y en menos de un mes murió.
Fue el mismo campesino, el que le platicò a mi abuelita el relato.
Tal ves sea muy sencilla la narración, pero viene de relatos hechos por la gente que vivió en la Hacienda de San Francisco
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