LA TUMBA.
Una mañana soleada acompañè a una amiga al panteón jardines del recuerdo en nayarit, a la tumba de sus papàs que murieron juntos en un accidente .
Después de poner flores y rezar le dije a mi amiga que nos fuéramos a la sombra de un árbol, nos sentamos y me llamò la atención una tumba, era de una mujer que falleció joven, de 25 años.
Le dije a mi amiga - mira èsta tumba, es de una mujer muy joven-, mi amiga me dijo, yo la conocí, fuè la esposa del dueño de la surtidora del hogar (de las primeras tiendas en tepic, muy conocidas).
Se murió de cáncer y dejò sus dos niñas, bueno, a los quince días fui a esa tienda, no recordaba mi visita al panteòn, y veo a un señor, que saca una foto de su camisa y le dice a la empleada que me estaba atendiendo , mira èsta era mi esposa y èstas son mis hijas de niñas, hasta entonces recordè, sentí algo muy raro y le comentè a la empleada èsto, jamàs lo olvido, esto sucedió hace cinco años.
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