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lunes, 22 de febrero de 2016

PARANORMAL PARTE TRES FRANCISCO PASCO






PARANORMAL.
Recordè que una conocida de mi Mamà le había dicho, que ella (Lupita) tenía el poder de correr a "eso", y yo le dije a mi hermanita, tu puedes correrlo, ¡córrelo!.
Ella me dijo el lugar en que viò que se metiò "eso", y la llevè hacia allà y ella le dijo que se fuera, lo decìa con fuerza, con coraje, y yo repetìa -- si, que se vaya--, yo la tenía sostenida de los brazos, y que empiezo a sentir mucho calor en un brazo.
Ella volteò y me dijo "ya te pego", le dije creo que sí, y me dice, puès apartate, porque te quiere dar más.
Al hacerme un paso para atrás la silla del comedor se movió un poco, como cinco centímetros hacia mi.
Siguió diciendo cosas, se calmó, me ordeno "abre la ventana que ya se va" la abrí y me dijo "ya se fuè".
Estaban conmigo mis hermanas, Magda y otra hermana que se llama Alicia (éramos siete hermanos, ahora somos seis uno ya se adelantó), les dije ya pónganle la bata y que ya no salga.
Mis padres no estaban, cuando la cambiaron se desmayó, me llamò y me dijo "son unos pende..., creen que me voy a ir".
Me desesperò y le dije groserías, ella nada más sonreía, le di una bofetada, con todas mis fuerzas, y le dije ya largate, cab...n, se me echò encima, nada más pude tomarla de las muñecas, y forcejeamos.
En eso le di como cuatro bofetadas más, se volvió a desmayar, y dije a mis hermanas, acuestenla ya, la acostaron.
Estaba dormida, y nosotros empezamos a comentar, resulta que estas curiosas, estaban espiando, y me preguntaron ¿te pego?, le conteste: yo creo que sí, les enseñe el brazo, y tenía tres marcas, como rasguños en la piel, empezaron a llorar y le dije, no pasa nada.
Magda me puso agua bendita y se me quitò, después de esto, mi Goidita me llamo, yo no quería ni verla, por los golpes que le había dado, pensé, ahora si Pankiko, ahora que le vean las marcas de los golpes, no ta la vas a acabar.
Puès fui, me dijo: ya se donde anda, en donde le pregunte, en la azotea, y sabes trae sangre en la boca y esta llorando, revisè a mi hermanita, buscandole las marcas de los golpes que le di y no tenía nada, ni siquiera en las muñecas, nada, respire aliviado.
Llegaron mis Padres, les comentamos que lo había corrido y les dio gusto. Esto fue lo que más fuerte me pasò a mi y a mi familia, pero aún así yo tenía muchas dudas.
Después de ese "round" con esa "cosa", las cosas fueron mejorando poco a poco, ya no le tenía miedo, inclusive lo corría y se iba.
Lo gracioso de èsto es que, nada más a mi me platicaba, por ejemplo, una ocasión me dijo que ya no venía solo, que llegó con más, y en el grupo, venía uno que si era muy malo.
Yo le decìa a lupita en esos momentos en que se manifestaba eso, tù tienes la fuerza de correr a quién se presente, así que no tengas miedo, le comenté a mi amigo el evangélico y me dijo que así era.
Otro pasaje de La Biblia, y otra vez la duda, pero una amiga de la familia le consiguió una cita en la Sociedad Mexicana Parapsicología (ya no existe), y le hicieron algunas pruebas, platicaron con ella y con todos los familiares que pudieron acompañarla.
Lo malo fuè, que nos pidieron lo que escribió, y no lo pudimos dar porque todo lo quemamos, y después asistir a algunas citas, el problema se acabó.
Un último hecho "raro", fue cuando visitè a mis Padres después de trabajar, mi Papa estaba durmiendo y mi Mama guisando, me dijo voy a la tienda por un refresco, le dije, no, yo lo traigo, no, yo voy, me contestó.
Fui a ver a mi Papà a la cama y estaba profundamente dormido, de repente una silla del comedor, empezò a temblar ligeramente.
Regresó mi Mamà y comentò: hoy no preguntaste por tu hermana, le contestè es que ya se donde fue.
En la noche que regresè con mis Padres, platiquè con mi Goidita, y me comento que una de las pruebas que le hicieron consistía en que, con la mente, moviera un péndulo, no lo movió, pero si movió la silla.
Cuando "la dieron de alta" todo volvió a la normalidad.
Esto que les platico no es por cambiar su forma de pensar, ni que digan es cierto, ni querer cambiar su concepto religioso, ni para espantarlos, simplemente les comparto estos hechos que nos sucedieron a mi familia y a mi.

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